Al asumir en el año 2004 como Subsecretario de DDHH de Corrientes fijé como prioridad trabajar activamente en la búsqueda de los Desaparecidos. Salvo Santa Fe, ninguna otra Provincia se había comprometido tanto con el tema. Luego de visitar al Equipo Argentino de Antropología Forense en Buenos Aires, nos marcaron una hoja de ruta que nos permitió al Estado Provincial, Familiares, Militantes, Organizaciones y al Ministerio Publico Fiscal de la Nación, formar un equipo de trabajo homogéneo, colaborativo y eficaz que permitió obtener resultados. Cuando dejé el cargo y hasta nuestros días el Gobierno de Corrientes prácticamente se retiró de ésta búsqueda, salvo contados aportes excepcionales.
De sus primeras instrucciones surgieron que había que rastrear todos los periódicos de la época y verificar el caso de cada fallecimiento que se registrara como N.N. en la provincia, luego seguir esa pista hasta la identificación y descartarlo cuando eso sucediera. Quedarnos sólo con los que no se registraba periodísticamente identificación alguna. Ésta tarea se realizó en el Archivo Histórico de la Provincia de Corrientes que facilitó la información. Hoy, al frente de dicho Archivo, el ex Gobernador de la Provincia Ricardo Colombi designó a un amigo, al Capitán Enrique Deniri, ex integrante del Batallón 601 de Inteligencia durante la peor época de la dictadura cívico militar. Muchas veces nos preguntamos, cuál hubiera sido el marco de colaboración si aquella búsqueda debiéramos hacerla hoy.
En ese mismo periodo se inició el rastreo de inhumaciones de cuerpos “N.N.” en diversos cementerios de la Provincia de Corrientes.
EMPEDRADO
Un trabajo de años anteriores de la Comisión Provincial de DDHH permitió avanzar rápidamente sobre 5 hipótesis en la localidad de Empedrado y así en junio del año 2.006 se realizaron las primeras excavaciones con métodos y protocolos modernos válidos para la identificación de desaparecidos, con el objetivo de agregar evidencia criminal a las causas judiciales en curso. Se pudo obtener información muy valiosa en poder de la Policía de la Provincia y contar con los testimonios de funcionarios policiales.
Ello porque en 1976 y 1977 las crónicas de la época daban cuenta de cuerpos que flotando por el Rio Paraná fueron hallados por pescadores y estos dieron cuenta a la Prefectura Nacional, que los rescató y los llevó a tierra, donde intervino la Policía Provincial que les dio sepultura en el Cementerio de Empedrado. Todos recordaban que pertenecían a jóvenes, muy golpeados, mutilados y preparados para que nunca fueran hallados. Probablemente la metodología elegida para hacer desaparecer a la mayoría de los compañeros y compañeras de Chaco y Corrientes.
Quince meses después el E.A.A.F. identificó el primer cuerpo como perteneciente a Rómulo Artieda, de Corrientes, luego un segundo cuerpo perteneciente a Julio “Bocha” Pereira de Formosa y finalmente a Juan Carlos Teresuck de Misiones. Hasta el presente y durante varias ocasiones se han realizado búsquedas y trabajos en Empedrado dado que no se descarta la posibilidad de nuevos hallazgos conducentes.
PASO DE LOS LIBRES
También el E.A.A.F. exhumó y confirmó la identidad de Gervasio Martín Guadix que muerto en 1.980 se encontraba inhumado en el Cementerio de Paso de los Libres. En esa misma ciudad se realizaron varias búsquedas, incluso con aparatos modernos y máquinas pesadas, en un predio rural sobre el Rio Uruguay conocido como “La Polaca”, utilizado por la represión como Centro Clandestino de Detención, sin resultado positivo hasta la fecha.
LA DESAPARICION FORZADA DE PERSONAS Y EL DERECHO AL DUELO
Las características de las desapariciones en la Ciudad de Corrientes, siempre planificadas rigurosamente y con una lógica militar indiscutible que descarta que los asesinatos y desapariciones pudieran ser obras de “Excesos”, o “errores” o de “algún loco o demente”, sumado a la confirmación de la metodología de arrojar los cuerpos al rio, permitieron que se aliente la esperanza de encontrar cuerpos y pruebas en el predio militar del Ex Regimiento de “Santa Catalina”, hoy urbanizado y sobre el Rio Paraná. Hasta la fecha hay un importante sector del mismo que permanece cautelado y que la utilización reciente de nuevas técnicas de exploración por medio aéreos, permite seguir abrigando la posibilidad de encontrar nuevos cuerpos enterrados clandestinamente y ser restituidos a sus familiares, para que estos puedan realizar el postergado duelo, tal vez el Derecho Humano más antiguo que la humanidad reconoce, ya que se encuentra contemplado en todas las culturas y libros sagrados de la humanidad, y que la dictadura militar argentina prohibió a más de 30.000 familias. Es posible imaginar por eso una escena teatral donde Antígona, desde el fondo de la Tragedia Griega, cinco siglos antes de Cristo, interpele con sus justos argumentos a Videla, Massera y Agosti sobre el derecho de todos los deudos de la tierra de disponer de los restos de sus seres queridos.
LA FORMACION DE PROFESIONALES EN ANTROPOLOGIA FORENSE
Uno de los objetivos propuestos por el E.A.A.F. fue la capacitación y preparación de recursos profesionales de la zona para realizar tareas en Antropología Forense. Entonces realizamos una convocatoria a las Fuerzas de Seguridad, docentes universitarios, médicos forenses y organismos de DDDHH, etc. para la realización de un curso intensivo en la materia, que fue realizado por más de cien profesionales, siendo la primera experiencia académica en su tipo en el Nordeste Argentino.
CEMENTERIO DE LAGUNA BRAVA
También se realizaron múltiples tareas en el Cementerio de “Laguna Brava” siempre conducidos, al igual que todos los anteriores y los actuales trabajos por un equipo incansable del Ministerio Publico Fiscal a cargo del Fiscal Federal Flavio Ferrini y los funcionarios de la Fiscalía Marisa Sanauria y Juan Martín García, así como antes lo hacía el entonces Fiscal General German Wiens hasta su jubilación.
VAMOS A LA REPUBLICA DEL PARAGUAY
A poco de iniciar la búsqueda en el año 2.004 advertimos que nos cruzábamos con información que se vinculaba con la República del Paraguay, vecina de nuestra Provincia y con el que nos une idioma, cercanía, cultura, familias, comercio y amistad. Es así que llevamos el caso acercado por la infatigable Beatriz García que desde hace muchos años buscaba a su madre Rafaella Filipazzi. Eso nos permitió construir una red de comunicación, información y solidaridad con valiosos compañeros de larga lucha contra la dictadura de Alfredo Stroessner, que continúa hasta la fecha. Todo el material aportado, las tareas del E.A.A.F. y el trabajo titánico de Rogelio Goiburú y un reducido pero indispensable equipo permitió hasta la fecha la recuperación de más de 30 cuerpos y la identificación plena de cuatro, entre ellas Rafaella, que descansa finalmente en “El Memorial del Desaparecido Correntino” en el Cementerio de la Ciudad de Corrientes, y su compañero José Potenza.